¡UN PAÍS SUMERGIDO EN LA BARBARIE! Creyeron que eran ladrones y los mataron con hachas y machetes
Las víctimas llegaron a La Mesa a las 4.00 de la tarde. A penas entraron a la barriada los vecinos los persiguieron, les bloquearon el paso y los mataron
Jolitze Isea García / Cabimas / noticias@laverdad.com / La Verdad
Sait de Jesús Chirinos Gutiérrez, un bombero voluntario de 21 años, y Eduardo José Romero Leal, su vecino de 20, fueron asesinados por los habitantes del sector La Mesa, zona rural de Cabimas, al ser confundidos con unos delincuentes. La iracunda multitud usó hachas, picos, machetes y palos para acabar con la vida de los jóvenes en medio de la vía pública.
Alexánder Chirinos, hermano del funcionario, contó que a su pariente le robaron la motocicleta el pasado domingo en la mañana saliendo de su casa en la carretera F con el sector Monte Pío. Un par de horas después, los delincuentes llamaron para pedir dinero a cambio de la unidad, pero con la condición de que él debía buscarla personalmente y sin la presencia de policías.
Chirinos, quien tenía tres días trabajando como mototaxista, desconocía cómo llegar a La Mesa y Romero se ofreció a ayudarlo. El bombero prestó otra motocicleta a uno de sus primos para rescatar la de él. Su hermano señaló que empezó en ese trabajo porque su esposa dió a luz una niña. “Él estaba preocupado, porque sin la moto cómo iba a trabajar, él como bombero voluntario no tenía sueldo”.
Ruego
Chirinos y Romero llegaron a La Mesa a las 4.00 de la tarde. Apenas entraron a la barriada los vecinos los persiguieron y les bloquearon el paso. Según unos testigos el rescatista suplicó por su vida. Se arrodilló en medio de la calle y pidió que lo revisaran, pues solo tenía el dinero para pagar el rescate de su moto, que pertenecía a los bomberos, pero no le creyeron.
A los dos los estrangularon, golpearon, cortaron y apuñalaron, quedaron irreconocibles, por quienes alcanzaron a ver sus cuerpos antes del arribo de la Policía científica. Los detectives identificaron a los occisos cuando revisaron su documentación.
En la noche los rumores del crimen llegaron a los oídos de sus parientes, quienes confirmaron la información al llegar al barrio. Los parientes informaron que toda su vida estuvo dedicada al servicio voluntario en diferentes cuerpos y era el menor de cinco hermanos.
La Policía reveló que Romero estuvo preso en el retén hace año y medio por robo, por lo que presumen que la comunidad actuó al verlo.