Roban títulos universitarios en Venezuela
El diploma otorgado por una universidad en Venezuela es un documento único e irrepetible. Si se deteriora o extravía, no hay reemplazo salvo copias certificadas del acta de grado, útiles para determinadas gestiones. Asimismo, para que sea totalmente válido, el mismo debe ser legalizado ante el Sistema Autónomo de Registros y Notarías (SAREN), así lo reseñó La Nación
En el pasado, la legalización o registro del título era una gestión bastante engorrosa y demorada, por lo que muchas personas preferían la intermediación de un gestor quien, a cambio de una tarifa considerable, se ocupaba de agilizar todo el trámite gracias a sus relaciones y contactos en los registros.
Sin embargo, desde la entrada en vigencia del decreto ley de Simplificación de Trámites Administrativos a finales de 2014, esta diligencia supuestamente es algo que puede hacerse en relativamente poco tiempo, siguiendo unos pasos claramente explicados en el portal www.saren.gob.ve, y la ayuda del intermediario se hace no sólo innecesaria sino ilegal. Esto dicta la medida, según información de El Nacional.
En la realidad, toda persona que requiera una gestión ante el SAREN lo primero que debe es acudir el día que le corresponde según su último número de la cédula de identidad (lunes 0 y 1; martes 2 y 3; miércoles 4 y 5; jueves 6 y 7, y viernes 8 y 9), hacer una cola tan temprano como las 4:30 de la madrugada, para asegurarse el cupo que le permitirá ingresar ese día a la oficina de registro para entregar sus recaudos, que incluyen compra de timbres fiscales, fotocopias, depósito bancario de la tasa requerida, etc. Y es a lo largo de este proceso que el ciudadano se convierte en la potencial víctima del robo de su diploma.
Pero, ¿para qué robar un título universitario?, pensará alguien ingenuamente. Pues para pedir importantes sumas de dinero a cambio de la devolución de este documento irreemplazable.
Según una alerta noticiosa publicada por el portal www.informe21.com, a través de las redes sociales usuarios del SAREN y víctimas de este delito reportan que las recompensas solicitadas alcanzan montos de hasta 100.000 bolívares.
“Mis planes están parados”
Luisa Tovar (no es su nombre verdadero por seguridad) concluyó sus estudios universitarios el pasado año y durante el último trimestre de 2014 recibió, con honores, su diploma. Actualmente se encuentra realizando todas las gestiones pertinentes para poder emigrar a Europa, con la idea de homologar su título, ejercer su profesión y con el fruto de su trabajo pagarse estudios de postgrado.
Pero, por el momentos, parte de sus planes están detenidos. El pasado mes de enero, a Tovar le fue arrebatado su título a dos cuadras del registro principal –ubicado en la céntrica avenida Urdaneta de Caracas–, cuando salía de haberlo retirado ya legalizado por esa institución. “Lo irónico de todo, es que el registro principal queda muy cerca del CICPC (Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas), y nadie me ayudó”, afirmó.
“Esa noche me comenzaron a llamar, y me están pidiendo 80.000 bolívares. Pero simplemente no los tengo ni tengo a quién acudir para que me los preste. Mi familia no es adinerada; el fruto de nuestro trabajo apenas nos alcanza para vivir. Por eso, por las pocas oportunidades que hay para mí, y por la inseguridad, es que mi plan era irme a España, a buscar un mejor futuro”, comentó.
“Puse la denuncia ante el CICPC por robo y extorsión; más que nada porque necesito la constancia de la denuncia para solicitar la copia certificada del título. Pero en realidad necesito el original para sellarlo y apostillarlo ante el Ministerio de Relaciones Exteriores, sin eso no puedo hacer nada en el exterior”, explicó.
Con información de LaPatilla.com